El número de musulmanes en el mundo roza los
dos mil millones, por lo que la industria mundial se apresura satisfacer las
demandas de un mercado con unas dimensiones colosales.
Si hasta hace poco el sentido del halal se concentraba
en el sector de la alimentación, en la actualidad la diversidad de industrias
que se sienten concernidas por el concepto halal ha aumentado
considerablemente, tanto como que una gran multitud de sectores han recibido de
buen grado la idea de ser certificados Halal para poder acceder a los mercados
árabes y musulmanes, convencidos de que el título halal es una oportunidad para
acceder a un fantástico mercado de cerca de dos mil millones de personas.
Sobre el significado Halal: lícito, autorizado, saludable, ético, no abusivo. Este término es aplicado a productos destinados a la alimentación, ya sean productos sólidos o bebidas, así como a productos destinados a la higiene personal, cosmética, peluquería, vestimenta, ocio, así como a otros aspectos de la vida cotidiana, sin olvidar aquellos otros conceptuados como servicios, tales como el turismo halal, tan en boga en estos tiempos, o bien a los servicios financieros de carácter halal, sin olvidar aquellos otros que tienen relación directa con contratos de compraventa o prestación de servicios diversos.
La carne es el grupo de alimentos más estrictamente regulado. No solo están estrictamente prohibidos la sangre, el cerdo y la carne de animales muertos o inmolados a otros que no sean Allah, también se requiere que los animales Halal sean sacrificados mientras se pronuncia el nombre de Allah en el momento del sacrificio.
“Os está prohibido (como alimento): la carroña,
sangre y carne de cerdo, y aquello sobre lo que se ha invocado el nombre de otro que no sea Allah, y los estrangulados, y los muertos por golpes, y los muertos por caer de lo alto, y lo que ha sido corneado hasta la muerte, y lo devorado por las fieras, salvo lo que hacéis lícito (por sacrificio) y lo que ha sido inmolado a los ídolos y lo que juran por las flechas adivinadoras.
Todo es esto es abominable… (Corán, capítulo V, versículo 3).
La dimensión del halal es mucho más amplia y de esencia mucho más universal, por lo que no puede circunscribirse únicamente al asunto de la alimentación.
El halal es, pues, el método que regula la vida de todo musulmán, ya sea para comer, vestir, viajar, comprar productos para higiene y belleza personal, contratar servicios de viajes y certámenes privados y profesionales, contratar, vender, comprar, etc. Todo debe regirse en torno a normas que tengan como fin mantener un equilibrio sin perjuicio para nadie.
Libre de toxicidades.
La alimentación es el sector más expuesto a la norma halal. De este modo, para que un alimento o bebida sea considerado halal, debe ajustarse a la normativa islámica recogida en El Corán, en las tradiciones
del Profeta Muhammad (sws) y en las enseñanzas y disposiciones de los juristas musulmanes.
Así, para que un alimento o bebida pueda ser declarado halal debe estar exento de cualquier sustancia o ingrediente no lícito (Haram) o de cualquier componente que proceda de un animal o sustancia prohibida.
Debe ser un producto elaborado y/o almacenado usando utensilios, maquinaria y recursos humanos conforme a lo que estipulen las normas establecidas en el Islam referidas a la regulación de productos y servicios halal, siempre atendiendo las normas sanitarias españolas, comunitarias e internacionales vigentes en cada momento.
El producto halal destinado a la alimentación no debe estar en contacto con una sustancia o producto prohibido durante su elaboración, producción, procesado, almacenamiento y transporte. Su trazabilidad debe mantenerse y respetarse en todo momento.
Los animales deben ser sacrificados de acuerdo con lo prescrito por la Ley Islámica.
Los pescados se consideran halal siempre y cuando tengan escamas. Los criados en piscifactorías y en otro tipo de explotaciones deberán certificar el proceso de crianza y engorde de los peces.
Los alimentos deben estar compuestos por materias primas, ingredientes como conservantes, colorantes o aromas que en su
origen o composición sean considerados halal.
Los piensos y alimentos animales deben contener siempre ingredientes halal.
Cuando el término halal se aplica a establecimientos del sector servicios (hoteles, hostales, bungalow, resorts, etc.), significa que estos cumplen con las condiciones requeridas por los musulmanes en cuanto a cocina halal (siempre separada y diferenciada del resto), hospedaje, transportes, sitio dedicado a la oración e instalaciones necesarias para la realización de las abluciones previas al rezo.
Cuando el término halal se aplica a productos de cosmética, perfumería, farmacia, puericultura, materiales de parafarmacia, higiene o higiene industrial implica que los mismos se han elaborado conforme a las normas establecidas por el Islam, entendiéndose que han seguido u
procedimiento halal y que están exentos en su composición de productos o ingredientes haram y/o derivados.
Cuando el término halal se aplica a productos financieros implica que los mismos cumplen con las condiciones exigidas por el Islam, en todo lo referido a tipos de interés, mora y otros condicionantes establecidos por el Islam.
¿Qué es Halal?
¿Qué es Haram?
Es haram todo animal que no haya sido
sacrificado conforme a las normas establecidas
por el Islam.
A tal fin, se entiende sacrificio halal cuando
el animal ha sido sacrificado posicionándolo en dirección a la Meca, siempre que sea posible,
y que antes de su sacrificio se constate la inexistencia de estrés, así como no
haber sido sometido a ningún tipo de violencia activa ni pasiva, buscando posición
que le resulte cómoda, sin atar, que el filo
a usar sea el correcto y sin muescas en su filo,
que el acto de pasar el cuchillo sea una hacia adelante y otra hacia atrás sobre la vena
principal, siempre de modo rápido y preciso, no permitiéndose una tercera pasada,
que en el momento de cortar se manifieste `En el nombre de Dios, Clemente y
Misericordioso´.
En consecuencia, todo sacrificio que no respete
el condicionante anterior será entendido como haram.
También son haram las carnes de los animales
hallados muertos o a los que se les ha causado muerte mediante violencia, incluida la
asfixia, incluso aquellos que han sido devorados por otros animales.
Es haram ingerir la sangre de cualquier animal,
la carne de cerdo y jabalí y sus derivados. Son también haram los animales carnívoros y
carroñeros, las aves con garras. Animales carnívoros con colmillos, por ejemplo, leones,
perros, lobos, tigres, etc.
Aves rapaces, por ejemplo, halcones, águilas, búhos, buitres,
etc. Reptiles, serpientes, cocodrilos.
Mulas y asnos. Ratas, escorpiones, insectos,
etc.
El alcohol y las bebidas que lo contengan
independientemente de su porcentaje, las sustancias nocivas o venenosas, así como las
plantas o bebidas intoxicantes.
Ingredientes procedentes de animales prohibidos
o de animales no sacrificados de forma halal.
Es haram la gelatina procedente del porcino,
productos elaborados que contengan o estén expuestos en su producción a
contaminaciones cruzadas, que la materia prima no sea halal o que no cumplan las normas de
elaboración halal.
Son haram aquellos intereses financieros
contrarios a las finanzas halal. Las apuestas y subastas no reglamentadas conforme a lo
estipulado por el Islam.
Mushbooh significa que es dudoso, que no alcanza el grado de halal.
Es un concepto que hace referencia a todo aquello para lo que no se puede determinar claramente su origen o hay diferencias en su valoración en las diferentes tradiciones coránicas, en cuyo caso cada musulmán decide su posición personal ante ellos.
En la elaboración de un producto, así como la de un servicio, pueden darse componentes que resultan inalcanzables para su valoración halal, lo que induce a clasificarlos como Mushbooh, “sin clarificar”.
El Profeta (sws) dijo: “Tanto el halal como el haram están a la vista. Entre los dos hay cuestiones dudosas que la gente no conoce. Aquellos que evitan esas cosas dudosas para salvaguardar su din (religión) y su honor estarán a salvo, mientras que los que se entregan a ellas pueden estar entregándose a lo ilícito (haram)”.
¿Qúe es Mushbooh?
La Certificación de Halal Consulting (HC) inspira máxima confianza entre los consumidores musulmanes, tanto en España como en el resto del mundo.
Halal
Consulting se distingue por el gran número de acreditaciones en países
musulmanes, todo ello en un marco de procedimientos con los más altos
estándares de calidad y seguridad alimentaria, así como un riguroso
cumplimiento de la doctrina islámica en lo que concierne al consumo halal.
Desde el punto de vista empresarial y comercial se proyecta un escenario sumamente prometedor con altas perspectivas de crecimiento y expansión. Un mercado que, en la actualidad asciende a cerca de 2.000 millones de personas como potenciales clientes.
Las previsiones son prometedoras, apuntando a que para el año 2030
uno de cada cuatro habitantes en el mundo será musulmán. Este mercado se
centra en una clase media cada vez con más prevalencia y poder adquisitivo constatando
que muchos de los países de mayoría musulmana están creciendo por encima del 5%
PIB anual.
Las estimaciones recogidas en términos mundiales de habitantes de religión musulmana para el presente año, 2020, son:
Asimismo, la presencia de población musulmana en países no musulmanes es cada vez mayor, por lo que la demanda y el consumo de productos y servicios halal está creciendo de manera exponencial en todos ellos. Estados Unidos tiene una población estimada de 4,5 millones de ciudadanos musulmanes;
Rusia cerca de 16 millones y China, otro de los grandes países y con una fuerte economía en constante crecimiento, con 26 millones de musulmanes.
En Europa las cifras van en aumento cada año, consolidando las cifras que ponen de manifiesto la importante presencia de una población musulmana cercana a los 30 millones de musulmanes, repartidos por los principales países europeos.
Francia, con una comunidad de 5,7 millones de personas sobre un total de 67 millones de habitantes, es actualmente el primer país musulmán de Europa, según un estudio de nivel continental realizado por el instituto norteamericano Pew Research Center (PRC). En la actualidad, esa comunidad representa 8,8% del total de la población francesa, cifra que arroja una proporción netamente superior a la de los otros Estados, como Bélgica con 7,6%, Gran Bretaña con 6,3%, Alemania 6,1%, Italia 4,8% o España con 2,6%.
A pesar de que tiene menor población, el porcentaje más altos corresponde a Holanda con 7,1%. El trabajo del PRC, realizado en 2016 en los 28 países que integran la Unión Europea (UE) más Suiza y Noruega, reveló que la comunidad musulmana en la región ascendía el año pasado a 25,7 millones de personas y representaba el 4,9% de la población total estimada en 495 millones de habitantes.
La Certificación
de Halal Consulting impulsa y favorece la expansión de las empresas españolas
en los mercados árabes y de mayoría musulmana, convirtiéndose en un acceso
seguro a grandes oportunidades de negocio.
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